Cualquier tipo de zapatos: Zapatillas, balerinas, stilettos, borcegos y hasta ojotas. Por más que se nos caiga el armario de calzado, nunca nos cansamos de encontrar nuevos zapatos y adorarlos tipo coleccionistas. (Para algunas hasta es parte de una terapia anti stress).
Hay mujeres que prefieren los zapatos altos. No podemos negar que estilizan la figura y nos hacen sentir más seguras. Si es cuestión de estatura las más bajitas aman aumentar unos centímetros y las altas, aunque no necesitan ganar estatura, también los desean. Porque los zapatos de taco alto se han convertido en un objeto fetiche.
Pero si hay que elegir, (No es mi caso. Para mi taco alto for ever and never) muchas entran en una lucha interna decidiendo si quieren verse sexys con taco aguja o cómodas con chatitas.
Los especialistas afirman que el calzado debe tener 3 centímetros de alto y con base ancha para una mejor salud del pie.
O sea, ni muy muy ni tan tan…
Los zapatos con tacos muy altos deforman la pantorrilla, pueden causar dolor en piernas y cintura, y fomentar la formación varices.
Los zapatos con plataforma (que vale aclarar no es lo mismo que el taco aguja) causan dolor de pies, pero no tanto como los stilettos. Los zapatos con punta delgada producen contracción de los dedos, acortándolos y pudiendo formar juanetes (Estamos hablando de zapatos y parece que nos referimos a la tortura china…)
Las chatitas también tienen su contra, deforman la curvatura del pie y de los dedos haciendo que el mismo se ensanche.
Lo importante es que el zapato sea de cuero, este forrado y se adapte a nuestras necesidades. En calzado y jeans no se escatima en gastos. Son inversiones muy importantes: tanto para nuestra imagen como para nuestra salud.
Para ser una mujer elegante, no es necesario estar siempre con tacos. Se puede ser elegante y estar con balerinas. Es básicamente una cuestión de actitud. Pero si hay un clásico indispensable que hay que tener en el closet es el stiletto negro. Nunca se sabe cuando lo vamos a necesitar. (Y uno rojito por las dudas…)
Hay mujeres que prefieren los zapatos altos. No podemos negar que estilizan la figura y nos hacen sentir más seguras. Si es cuestión de estatura las más bajitas aman aumentar unos centímetros y las altas, aunque no necesitan ganar estatura, también los desean. Porque los zapatos de taco alto se han convertido en un objeto fetiche.
Pero si hay que elegir, (No es mi caso. Para mi taco alto for ever and never) muchas entran en una lucha interna decidiendo si quieren verse sexys con taco aguja o cómodas con chatitas.
Los especialistas afirman que el calzado debe tener 3 centímetros de alto y con base ancha para una mejor salud del pie.
O sea, ni muy muy ni tan tan…
Los zapatos con tacos muy altos deforman la pantorrilla, pueden causar dolor en piernas y cintura, y fomentar la formación varices.
Los zapatos con plataforma (que vale aclarar no es lo mismo que el taco aguja) causan dolor de pies, pero no tanto como los stilettos. Los zapatos con punta delgada producen contracción de los dedos, acortándolos y pudiendo formar juanetes (Estamos hablando de zapatos y parece que nos referimos a la tortura china…)
Las chatitas también tienen su contra, deforman la curvatura del pie y de los dedos haciendo que el mismo se ensanche.
Lo importante es que el zapato sea de cuero, este forrado y se adapte a nuestras necesidades. En calzado y jeans no se escatima en gastos. Son inversiones muy importantes: tanto para nuestra imagen como para nuestra salud.
Para ser una mujer elegante, no es necesario estar siempre con tacos. Se puede ser elegante y estar con balerinas. Es básicamente una cuestión de actitud. Pero si hay un clásico indispensable que hay que tener en el closet es el stiletto negro. Nunca se sabe cuando lo vamos a necesitar. (Y uno rojito por las dudas…)
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