jueves, 31 de agosto de 2017

Cuidado con el CUCO!

Las mujeres somos muy distintas entre nosotras pero todas le tenemos miedo a algo.

Temor ante las dificultades del presente y del futuro, temor a lo desconocido (y a algunos conocidos…).

Los miedos también dependen de la etapa que estamos transitando.

Durante la adolescencia nuestros temores (que ahora constituyen anécdotas de las que nos reímos mucho) pasan por no sentirnos aceptados por la manada, llenarnos de acné, no poder salir a bailar el fin de semana, o pasar vergüenza delante del chico que nos gusta.

Mientras estamos cursando la facultad tememos no aprobar un examen, no poder recibirnos, o no cumplir con las expectativas de nuestros padres.

Cuando logramos obtener el ansiado título de grado, corremos el riesgo de no encontrar empleo, o de perderlo si lo tenemos.

Cuando consideramos tener todo equilibrado, tenemos miedo de no llegar a tener una relación normal con una pareja, de no lograr poder quedar embarazada, o de no ser capaz de mantener a un hijo.

Salir a la calle de noche y ser secuestrada o sufrir un robo, sufrir alguna enfermedad, que el matrimonio se acabe y no encontremos otra persona que nos aguante, de viajar en avión, y hasta de envejecer sin dinero son algunos de los más comunes. Pero hay millones. Algunos hasta se convierten en fobias cuando el miedo es desmedido.

Y cuando pensamos que tenemos la mayor parte de nuestra vida bajo control, nos surge el miedo de no intentar nada emocionante, de tener una vida monótona y aburrida. Entonces es cuando empezamos a enfrentar nuestros miedos como sea. Decidimos viajar en lo que sea (a dedo, en avión, o en carreta), hacer deportes extremos o cosas locas para divertirnos y pasarla bien. (Algo muy cercano a sentirnos felices tal vez?)

Si bien muchos miedos están determinados por mandatos sociales, y depende de nosotras engancharnos o no, hay algo a lo que las mujeres de todas las edades le tenemos miedo: Engordar y envejecer: dos cuestiones totalmente inevitables con lo que vamos a tener que amigarnos y convivir para no dejar de ser felices.

jueves, 17 de agosto de 2017

Marche una napo con queso!

El menú infantil por excelencia en la gran mayoría de los restaurants, es la MILANESA CON PAPAS FRITAS. Muchas veces nuestros hijos no quieren ese menú, pero se los pedimos para poder picar sin culpa o comer las sobras.

Antes de que existiera, o tuviéramos acceso, a la Cajita Feliz, la MILANGA era el menú preferido de muchísimos chicos, y unos cuantos grandes también.

A pesar de tanto sushi, globalización y nuevas tendencias vegetarianas, la milanesas siguen vigentes y a muchas nos sacan de apuro.

Varios de Uds., seguramente han visto a sus abuelas o madres estirar la carne (ya sea de pollo o vaca) con un martillo (ahora existen unos martillitos diseñados especialmente para tal uso), pasar esas fetas por una mezcla de huevos y luego con el pan rallado darle vida a un manjar.

Ahora son muy pocas las personas que se toman ese trabajo, muchas casas de comidas venden kilos de milanesas listas para cocinar o directamente para poner en la mesa.

Cada vez que hay que improvisar un menú rápido y para invitados sorpresa, pensamos en las milanesas.

Fritas, al horno o asadas. Rellenas con queso, de berenjena, pescado, soja, cerdo y hasta de garbanzo. Las variedades son infinitas y para todos los gustos. Con ajo, pimienta o ralladura de limón.

Cada cual desarrolla su gen cocinero a gusto y piacere. Hasta el pan rallado contribuye a que nuestra receta sea irresistible. Rallado en casa, para rebozar, hornear o freír.

Los secretos de cómo pueden ser más ricas van pasando de generación en generación.

Hasta existen clubes que nuclean a fanáticos de este menú, festejos por el día nacional de la milanesa (3 de mayo), y cursos de cocina especiales para crear las mejores milanesas.

Dicho todo esto, solo queda elegir al guarnición: papas fritas, ensaladita verde o puré mixto?

lunes, 17 de julio de 2017

Es mejor seguir las instrucciones

Antes de comenzar cualquier relación, habría que leer el manual de Usos y Costumbres de cada persona.

No es fácil ser mujer en estos tiempos, y menos aún que nos entiendan los hombres. Es muy común que las mujeres hagamos afirmaciones que no se condicen con la realidad. Pero no son mentiras!!! Son tergiversaciones mínimas de la realidad.

Encabeza la lista y for ever and never la frase más dicha en nuestra historia: NO TENGO QUE PONERME!!!Seguida en segundo lugar por: ESTOY LISTA EN CINCO MINUTOS.

Estas dos afirmaciones no ameritan ningún tipo de comentario adicional. Sería justificar lo injustificable.

Prosigamos: LA EDAD NO ME AFECTA. Esto casi siempre es mentira, porque la edad siempre nos importa. Nuestra apariencia es muy importante tanto en cuestiones amorosas como personales. Y si alguien hace mención a que no aparentamos la edad que tenemos, que se asegure de que va a decir que parecemos más jóvenes.

ANDA A LA FIESTA Y PASALA GENIAL!!! YO ME QUEDO EN CASA. Esto significa Sr marido, novio o lo que sea, que una mujer le está dando la oportunidad de decidir (por su propia voluntad) quedarse en su casa a hacerle compañía. De lo contrario, puede que se arme un hermoso lío y a la vuelta le hayan cambiado la cerradura.

FUE LA MEJOR NOCHE DE SEXO DE MI VIDA. Ésta, es la frase gemela de los hombres cuando dicen: ES LA PRIMERA VEZ QUE ME PASA. Para evitar el mal momento, y la incomodidad que podría generar cualquiera de las dos frasecitas, lo mejor es hacer como que no paso nada. Después se ve que onda si prospera la relación o no.

Y para finalizar el Top Five, de los creadores de NO ESTOY ENOJADA, llega: ESTOY BIEN!. Esta afirmación genera dificultad de reconocimiento. Hay una delgada línea entre la realidad y la ficción, porque juegan infinitas variables: el tono de voz, el volumen, el comentario anterior, el saludo matutino del día pasado, o una conversación mantenida hace dos meses. Así una sucesión de hechos no tenidos en cuenta que pueden afectar cualquier tipo de reacción.

En esta amigos hombres, les doy la derecha… los hombres son de manual, las mujeres… NO!

miércoles, 5 de julio de 2017

Boquitas Pintadas


Los labios rojos terminan de completar un look que nos saque de la monotonía o rutina diaria. (Y más con el frío que pareciera aburrir cualquier outfit).

Se sorprenderían de saber que hay estudios científicos que animan a las mujeres a pintarse los labios de color rojo.

Cuando van pasando los años, los labios se hacen más pálidos, por lo que usar rouge colorado da una idea de mayor juventud y luminosidad.

El color rojo, es el más sensual! Desde tiempos inmemorables donde Cleopatra usaba tintas para colorear sus labios, hasta en los 80´s donde en la recordada película “Una chica al rojo vivo”, la protagonista irradiaba sensualidad, las mujeres nos sentimos en algún momento de nuestras vidas atraídas por usar labios rojos.

Si nos queremos sentir sexys y con toda la confianza para arrasar, ni dudar en recurrir a un lipstick rojo.

Hasta las mujeres más tímidas, se atreven a usarlo porque además es el color de moda. Sobre todo en los momentos que necesitan marcar la diferencia.

Es importante no quedar como payasas con la cara pintarrajeada. La idea es dar un aspecto seguro, competente, joven y prolijo por sobre todo.

Así que si decidimos incursionar en el maquillaje de nuestras boquitas, tratar en primer lugar de no tonalizar mucho el resto del rostro.

Las que tienen labios finitos, deben evitar los rojos muy oscuros o usar delineador por fuera de los labios (similar al color del labial) para dar sensación de labios más gorditos.

El tono de piel debe ser tenido en cuenta también. Para pieles morenas van bien los tonos rojos con base violeta, cual vino malbec. Las pieles mas blancas se maridan mejor con rojos de base naranja tipo coral.

Y por favor! Antes de salir sonrían delante del espejo, no vaya a ser que nos hayan quedado manchados los dientes con tanta pinturita, y hablemos con varias personas antes de encontrar una amiga que nos avise.

martes, 27 de junio de 2017

Face Time!

El bloqueador de sol, el blanqueador de manchas, el secador de granitos, la crema humectante y cuantas cosas más tenemos en nuestro toilette para poder llegar a los 40 con la cara radiante y joven.
Embocar la estación del año justa para hacerse algún que otro peeling o tratamiento estético, que con la llegada del verano arruinaremos tomándonos todo el sol que podamos.
Hay mujeres que ni siquiera se pone protector solar, y tienen una piel que pareciera un photoshop viviente! Ni siquiera se delinean los ojos para mostrar una mirada más definida (gente suertuda si las hay!).
Quien no se ha untado la cara con miel porque leyó en internet que funciona como antibacterial y deja la piel limpia y saludable? Cualquier cosa que no hayamos probado, es válida para mejorar el aspecto de la cara (así sea un engrudo oloroso…)
Los rituales antes de ir a dormir son infinitos!!! Desde la crema de limpieza, pasando por un agua miscelar para terminar en una máscara o sérum revitalizante  más el gel frío para las ojeras.
Después de esto tratar de dormir al menos 8 horas (o las que se puedan, siempre y cuando ningún hijo se pase de cama,  tenga fiebre o el marido se lleve sábanas, abrigo y cubrecama).
Ni que hablar al levantarse! Hay que elegir entre desayunar, maquillarse o el ritual de belleza.
Mínimamente nos tenemos que sacar toda la mezcla que nos quedo de la noche anterior, humectar el rostro, poner corrector de ojeras en las imperfecciones (esto puede llevar una eternidad) y después comenzar a dibujarnos la cara con diversos maquillajes  como para aparentar algo de juventud.
Al terminar todo esto, nos acordamos que no usamos protector solar, y como ya no tenemos tiempo, nos ponemos un poco sobre la capa de maquillaje como para después no quejarnos de las manchas. Porque nos llega a agarrar el sol sin protección, toooooodo lo que hicimos anteriormente no sirve de nada.  

Querer detener el paso del tiempo no es imposible, pero lleva tiempo. Qué contradicción no? 

viernes, 9 de junio de 2017

Frío: no te tenemos miedo!


Los días fríos son realmente deprimentes. Es más! Hay gran parte de la población que sufre de Trastorno Afectivo Estacional. Pero no nos podemos quedar con eso hibernado toda la temporada. Hay que ponerle toda la onda!!!

En invierno la mayoría de los Outfit tienen colores oscuros, pero una buena calza estampada, o un pañuelo colorido nos levanta hasta el espíritu.

Comenzar a incursionar en prácticas culinarias, invitando a amigos y agasajándolos con un buen plato de Locro, Fondeau o Espaguetis al pesto.

La comida rica siempre ayuda a pasar el invierno (no son gratuitos los kilos de más que adquirimos en el invierno), y unos chocolatitos antes de acostarnos no son la excepción.

El “Blanco Ala” en la cara sólo le queda bien a Andrea del Boca, así que un buen maquillaje también nos anima la salida.

Juntarse con amigos! El calor humano es infalible y nos hace pasar un buen rato. El aislarse en invierno no es una opción. Así que si nos da frío salir a tomar un cafecito, invitar unos ricos mates al lado de un hogar a leña suena muy “calentito”.

Con todas estas comiditas, no hay que dejar de hacer ejercicio. Nos va a activar el metabolismo, vamos a liberar endorfinas y de paso quemamos calorías (como para que la llegada del verano no nos agarre taaaaaan rellenitas).

Infaltable una salida romántica al cine, acompañada de pochoclos y submarino. Leer libros, pintar mandalas (para los que tienen paciencia y dedicación) y compartir tiempo y actividades en casa: con niños, pareja o amigos. Siempre el compartir con personas que queremos nos da calor al alma. Y tengamos en cuenta que si no existiera el odiado invierno, no amaríamos tanto el verano.

viernes, 26 de mayo de 2017

¿Cuál es el mejor horario para salir de Shopping?

Al despertarse? Después del mediodía? O Justo al horario de cierre? Si bien cualquier hora y cualquier momento del día nos viene bien para ampliar nuestro guardarropas. Existen mejores días y horarios para hacer compras de calidad.

Si lo que queremos es hacer poca cola en la caja para pagar, o no tener que esperar mucho tiempo para que nos atiendan, lo mejor es ir después de almorzar. Las horitas de siesta, que rondan entre las 14 y 16 horas son el mejor momento para encontrar estacionamiento (o estacionar en doble fila y que no nos hagan una multa), salir sin niños, evitar la multitud de gente, y disfrutar de un paseo sin apuro.

Pero si tenemos en mente comprarnos una prenda ajustada, lo peor es salir después de haber almorzado, ya que cualquier cosa que elijamos nos va a marcar una pancita que nos puede cambiar la percepción real del talle que necesitamos. Y por supuesto, nada nos va a convencer.

Y si la ropa que nos gusta está en locales de ropa que hacen horario “cortado”, lo mejor es ir a primera hora de la mañana o a primera hora de la tarde. Si vamos cerca del mediodía, tenemos que tener en cuenta que las vendedoras tienen tanta prisa por llegar a almorzar a sus hogares como nosotras. Esto no quita que puedan recibirnos de la mejor manera posible, pero también podemos mostrar un poco de empatía.

Para comprar zapatos, hay que evitar probarlos durante la mañana. Cuando nos levantamos nuestros pies y piernas están descansados. Y muy al contrario de lo que se piensa habitualmente, los zapatos deben ser probados por la tarde, o luego de haber realizado varias actividades, cuestión de que no nos aprieten luego de un día cansador.

Los jueves la mayoría de los negocios reciben las prendas nuevas, reorganizan los percheros, las vidrieras y se preparan para el fin de semana (que habitualmente es donde suben las ventas). Así que para ganar de mano las prendas que más nos gustan, los jueves a primera hora de la tarde es ideal para hacernos una escapada.

Todas las temporadas, las marcas producen una prenda que nos vuelve locas y pagaríamos lo que sea por tenerla. Esa prenda que es un HIT, a principio de estación duele un ojo de la cara comprarla, pero si esperamos un mes o dos, seguramente la encontraremos a mejor precio. Obviamente no es lo mismo salir en pleno invierno con un tapado de oveja, que en agosto y con viento norte. De todas maneras el clima está tan loco, que en mayo tampoco hace tanto frio para andar como esquimales.

Y por supuesto, para comprar de calidad y a buen precio, nunca está demás aprovechar las liquidaciones: Colores neutros, prendas clásicas y paciencia para usarlas recién un año después. Aunque esta última opción no es para ansiosas.

lunes, 8 de mayo de 2017

El Arte de tejer 2.0

Quienes andan cerca de los 40 años, sabrán reconocer el nombre de la famosa revista “El Arte de Tejer” que traía patrones y explicaciones de puntos para tejer tanto al crochet, como a dos agujas. Y si bien es una práctica que se enseña habitualmente de abuelas a nietas, ahora es mucho más fácil y accesible, ya que a través de tutoriales de internet se puede aprender la técnica. Con internet no hay excusas para decir: No puedo!

Si bien, esta actividad está asociada directamente a las abuelas (Una actividad de VIEJA, hablando mal y pronto), resulta cada vez más común que mujeres jóvenes tejen ya sea para relajarse, compartir, fortalecer lazos sociales y porque no, para vender sus productos.

No es lo más sexy ver a una veinteañera tejiendo, pero quien dice que tejiendo bufandas se pueda sumar puntos a la hora de conquistar. (Que sepa tejer, que sepa bordar y sepa abrir la puerta para ir a jugar…).

Ahora la actividad está de moda, tanto así, que existen espacios de reunión donde un grupo de personas se junta a tejer compartiendo experiencias y habilidades. Y esto no es sólo exclusivo de mujeres, también hay hombres incursionando en estas manualidades.

Diversas propuestas de actividades surgen y hacen de este “arte” una actividad solidaria también. Por ejemplo tejer cuadraditos para que luego formen parte de grandes mantas que cobijarán a niños sin hogar.

Otras personas, mientras Netfliquean lo utilizan como alternativa para eliminar el estrés y combatir la depresión. Especialistas explican que la repetición de los movimientos de las manos al tejer, ayuda a las personas a concentrarse, relajarse y disfrutar más plenamente la vida.

Cada pieza que hacemos, es única, está hecha con mucha dedicación y cariño. Así que la que se anime y con el comienzo del otoño, se larga oficialmente la temporada de tejido con lanas, para brindar calorcito a alguna persona que queremos mucho.

jueves, 27 de abril de 2017

Mudanza vi, suerte para mi!

Dicen que uno de los tantos momentos más estresantes del ser humano, es tener que hacer una mudanza. Y de solo pensar que hay que guardar una casa en cajas, ya nos agota.

Nos damos cuenta de que es increíble la cantidad de cosas que guardamos porque algún día usaremos. Y esto va desde guardar ropa, hasta papeles, cintas y utensilios de cocina.

Cuantas veces hacemos una Fondeau? Dos veces al año? Posiblemente menos, pero la llevamos en cada mudanza que hacemos.

El jean talle 23 que compramos con nuestro primer sueldo, no nos va a volver a entrar, y ya cobramos (por suerte) varios sueldos más. Por lo tanto: realmente vale la pena seguir guardándolo?

Una mudanza se convierte en un momento lleno de emociones porque decidimos que no nos vamos a llevar tooooodo lo que tenemos, y empezamos a ver qué regalamos, qué vendemos y qué tiramos a la basura.

Antes de embalar todo, hay que ordenar lo que tenemos en stock: libros, fotos, tarjetas de regalos e invitaciones a casamientos. Si! Dije invitaciones a casamientos. Tengo una amiga que guarda las invitaciones aunque hayan pasado más de diez años. Es más! Ni yo guardo la mía, y ella la tiene.

Ni hablar si la mudanza incluye familia numerosa. A saber: hijos, perros y algún familiar agregado. No queremos ni pensar en cargar los juguetitos mínimos que viene en los Huevos Kinder. Y que ni se nos ocurra olvidarlos, porque les aseguro que a las tres de la mañana de la primera noche en la nueva casa, tenemos que salir a buscar el pescadito con alas del huevito que se abrió hace dos años.

Las mudanzas son como un nuevo comienzo, una nueva oportunidad de prometernos que en la próxima morada vamos a ser más ordenados, vamos a acumular menos cosas innecesarias o vamos a usar más la Fondeau que nos regalaron para el casamiento.

Puede que sea estresante, pero qué lindo es estrenar y proyectar nuevos deseos! Y si no es nuestra la mudanza y nos cruzamos con un camión que está haciendo una, no nos olvidemos de decir: Mudanza vi, suerte para mí! (Por ahí un nuevo comienzo está por venir…)

lunes, 17 de abril de 2017

Crónica de una noche de insomnio

Reírse de una mismo es fundamental para restarle importancia a los problemas diarios (y a los nocturnos también). Muchos tienen noches difíciles, en las que por más que cuenten millones de ovejas, Morfeo nunca llega para atraparnos en un profundo sueño.

El día después nos comportamos como Zombies. Ese día pasará desapercibido porque ni nos vamos a anoticiar de los sucesos. Y casi al mediodía, cuando ya estamos desesperados por ir a dormir una siestita, nos preguntamos: ¿Cómo fue que llegamos a esto?

Tuvimos un día normal. Algún que otro suceso aislado que pudo habernos puesto nerviosas, pero nada especial.

Luego de una cena liviana, nos retiramos a nuestros aposentos. Activamos la alarma y nos disponemos a conciliar el sueño.

Media hora, una hora… y se hicieron las 2 de la mañana y ni miras de poder dormir.

Intentamos controlar una respiración profunda imaginando un lugar tranquilo pero nada... seguimos inmutables.

Como si fuera algo inevitable y muy obvio, agarramos el celular y comenzamos a revisar tuits, publicaciones en Instagram, una miradita por Facebook… y como quien no quiere la cosa terminamos stalkeando a un ex.

Como para engañarnos, ponemos Netflix… un poco de ruido y algún culebrón español nos harán dar sueñito. Sin embargo, no dejamos por supuesto de ver si el ex se casó..., si conocemos la actual pareja, si tuvo hijos, si sigue lindo o esta baqueteado.

En un momento, totalmente activadas, nos agarra la magnífica idea de hacer una excursión a la heladera, pensando que con la pancita llena nos vamos a poder dormir.

Cuando retornamos a la cama, Netflix nos pregunta si vamos a continuar viendo la serie (a lo que responderemos NO, porque no vimos tampoco nada de los tres capítulos que pasaron por estar persiguiendo gente en las redes sociales).

Con toda la tecnología apagada, de pronto… nos da un poco de sueño. Ya los pajaritos comienzan a cantar… y cuando logramos entrar en el descanso, suena la alarma para empezar el día.

Día en que por más que nos esforcemos, y le pongamos toooooda la onda, estará perdidísimo.

Lo único que nos va a sacar una sonrisa a media mañana es acordarnos que el chico que nos dejó en la secundaria (y perseguimos toda la noche en Facebook) está pelado y gordo.

domingo, 2 de abril de 2017

CERO sentido de la orientación

El sentido de la orientación parece ser un DON par aquellas personas que hasta saben identificar el Norte del Sur en medio de la nada misma con solo mojar su dedo y esperar de donde viene la brisa.

Para las que nos cuesta llegar a nuestras casas sin perdernos por más que estemos a cinco cuadras, es una odisea. Seguramente es cuestión de prestar más atención, pero hay personas que vienen con los mapas cargados en el disco duro desde el nacimiento (no es mi caso).

Interpretar mapas, ubicarse en una ciudad, o elegir la salida correcta de un shopping, no es algo que a los desorientados nos salga muy bien hacer. Muchas veces la única forma en la que aprendemos es perdiéndonos setecientas veces para llegar a destino. Y eso que ahora la mayoría de las personas contamos con un GPS en el celular.

Las personas que tienen CERO sentido de la orientación han vivido situaciones como éstas con más frecuencia de las que quisieran.

Salir de un local en un shopping y volver por donde vinimos pensando que seguimos nuestro recorrido, sin darnos cuenta de que estamos mirando las mismas vidrieras que vimos hace minutos atrás.

Discusiones en las vacaciones por ser pésimos copilotos y orientar mal al conductor. Si le hacemos caso al GPS, porque le hacemos caso. Y si no le hacemos caso, porque no lo hacemos. (GPS maldito! Jussssto en esa oportunidad tenia mal cargada la ruta. Así tampoco la tecnología estaría colaborando con la causa).

Ir a una casa alejada de la ciudad, e ir detrás (por no decir pegados al punto de escuchar la música del auto que está delante nuestro) de “alguien” que sepa dónde queda la morada para evitar perdernos. Si esto significa poner en riego nuestras vidas por ir a toda velocidad y no perder de vista al experto u experta, lo hacemos igual! Toda esta aventura mientras pensamos que hubiésemos ido en el sentido totalmente contrario al que estamos yendo, si hubiéramos tenido que decidir nuestro propio camino.

Hasta leyendo los libros de “Elige tu propia aventura” elegíamos mal: siempre terminabamos en el agujero negro sin vida de otro planeta, o dentro de un laberinto sin salida. Esta capacidad de desorientación también es innata.

Por suerte personas totalmente despistadas contamos siempre con personas cercanas con super poderes de orientación que nos salvan del estrés de tener que elegir el camino correcto.

Identificar NORTE y SUR (Arriba y Abajo), mal que mal lo hacemos. Ahora cuando se trata de decidir cual el ESTE y el OESTE… para que esforzarnos. Nunca pero nunca daríamos en la tecla (Derecha izquierda?, izquierda y derecha?, con la mano que escribimos? O con la otra? Y los zurdos como hacen?).

Por suerte hay una buena noticia!!! Este DON de identificar los puntos cardinales y orientarse en la vida, se puede aprender. (Habría que prestar atención y todas esas cuestiones, pero podríamos lograrlo). Y si no, la otra opción es conocer a la persona indicada que dirija el curso de tu vida (muy cursi jajaja pero sin esa persona que nos haga de lazarillo seguro nos perdemosssssss.)

jueves, 16 de marzo de 2017

A volar!

Embarcarse en la aventura de viajar es una sensación espléndida que se empieza a vivir desde que planeamos el destino y hasta que imprimimos las fotos.

Cuando viajamos en avión, siempre pensamos que es mucho mejor que hacerlo en auto o en colectivo por la rapidez del medio de transporte, o porque ninguno de la familia tiene que clavarse siendo el chofer. Pero como todo, tiene sus desventuras.

Le ponemos una cintita roja para identificar nuestra valija de color negro, y nos damos cuenta de que hay 20 pasajeros más con la misma idea.

Pasillo o ventanilla? Que elegir? Si vas acompañada no es problema porque si uno se arrepiente en medio del trayecto, pide cambio y listo! Pero si el viaje es sin compañía, empezamos a dudar. Estar del lado de la ventanilla es lindo para ver despegues y aterrizajes (siempre y cuando no nos durmamos tooodooo el viaje y no tenga ni el más mínimo sentido haber elegido dicho lugar).

Pedir que nos acomoden al lado del pasillo tiene algunas ventajitas más. Por ejemplo al momento de ir al baño, ya que no se molesta al compañero de viaje. Y además si nos dormimos plácidamente, podemos estirar un poquito mejor las piernas, sacándolas al pasillo. (A estar atentos cuando pase el carrito con el servicio de catering porque puede doler un poquito el impacto del contenedor en los tobillos jajaja)

Cuando el viaje dura no más de 4 horas, no es inconveniente mayor la convivencia con 50 personas más. Pero si cruzamos esa delgada línea de tiempo, empezamos a desear haber tenido más dinero para viajar en Primera Clase.

Niños llorando, madres caminando y paseando niños por los pasillos, gente que conversa (y habla mucho mucho mucho), pasajeros que al momento de elegir entre dos menúes no se decide entre la pasta o el pollo y cuando finalmente toman la determinación, se quejan del menú que le dieron.

Gente con pánico a viajar que está contenida bajo los efectos de algún fármaco, que sabemos que cuando se termine el dicho efecto, va a comenzar su pesadilla, y la nuestra. Porque si no teníamos miedo a volar hasta ese momento, ahora si lo vamos a tener.

Y por si fuera poco, la persona que para apaciguar sus nervios te habla e intenta entablar una amistad en la cual no estamos interesados. Así sea viaje de placer o de trabajo, la mayoría queremos descansar el tiempo de vuelo (sea poco o mucho) o mirar una peli, escuchar música… Pero no socializar (menos conocer a través de fotos a toda la parentela).

No podemos meter bocadillo como para cortar el chorro de palabrerío, ni para decir que queremos ir al baño. Tampoco podemos decirle ni siquiera cortésmente que no nos interesa conversar porque nos puede arruinar el resto del viaje. Así lo que mejor, es montar un show: hacernos las desmayadas, o comenzar con un ataque de nervios como para que la azafata buena onda sugiera relax y tranquilidad.

 

miércoles, 8 de marzo de 2017

Quien va al super esta semana?

Ir al supermercado, para algunos resulta un paseo, un hobby, un momento de relax. A otros nos parece el momento más aburrido del día, o el más estresante si vamos con niños.

Esta actividad tan simple y mundana, muchas veces se convierte en todo un reto: agarrar el carrito que no tenga las ruedas trabadas. Y si nos tocó “ese” carrito, tratar de no chocarlo contra las góndolas.

Que a tu hija no se le ocurra abrir un paquete de fideos y sentarse en el medio del pasillo a “hacer comidita”.

Que justo sea horario pico y tardemos más en las cajas que en hacer todas las compras.

O que te toque la que tiene tarjeta de crédito sin fondos adelante y pruebe con cinco plásticos diferentes para ver si tiene la suerte de que alguna este pagada.

Respirar hondo para superar la góndola de los chocolates, el dulce de leche, y las galletitas que son la mayor tentación (pareciera que una luz intermitente nos estuviera llamando desde el momento en que agarramos el carrito para empezar la aventura). Por más que nos resistamos vemos desde cualquier punto las Mini Melba y el envoltorio amarillo de los Block.

“Los que saben” dicen que no hay que hacer las compras cuando tenemos hambre. Así que habría que probar comiendo aunque sea una barrita de cereal antes de ir, para evitar comprar productos innecesarios. Lo mismo si vamos con niños: hay que llevarlos “pipones” porque si no van a abrir hasta un paquete de jabones para comérselo.

Si nuestro acompañante de lujo es chiquito, mal que mal lo dominamos poniéndolo en la sillita del carrito cuyas ruedas se traban. Pero si ya no entra ni haciendo fuerza, lo tendremos que convencer que haga de locomotora delante del cochecito. Porque si toma el timón la criatura, lo primero que choca son nuestros tobillos. Y después de chocarte el dedo chiquito del pie con un mueble, no hay nada más molesto que ser chocada por un changuito del súper en el tendón de Aquiles.

Llevar la lista es fundamental, y tratar de no salirse un desafío (pero vale la pena intentarlo). Esa lista supongamos que la hicimos entre todos los integrantes de la familia y les hicimos creer que nos importan todos sus aportes. Después vamos al súper y compramos lo que a nostras nos parece, obviamente. Y si alguien se anima a quejarse la respuesta amable será: Hubieses ido vos!

Entre tanto que llevamos, antes de pasar por la caja, viajamos al polo norte y buscamos los lácteos. (No me van a negar que cuando andamos por la zona de los congelados, se nos congelan hasta las pestañas!)

Y ahora si, después de obtener todos los producto de la lista, superar la última prueba: las gondolitas que están delante de las cajas con chocolates, gomitas, caramelos Halls, y alfajores de arroz. Obviamente la opción más saludable sería el alfajor de arroz, pero si llegamos hasta ahí habiendo logrado saltear la góndola de los dulces y conducir un carrito enclenque; pensando que después tenemos que cargar cerca de 10 bolsas sin que se nos corte la circulación de los dedos, nos merecemos un chocolatito bien rico.

miércoles, 1 de marzo de 2017

Mejor cocino yo

Ir a cenar fuera de casa es un hábito muy lindo y divertido pero que por diferentes circunstancias se ha ido reduciendo. Ya sea por el costo de una cena en un bonito restaurant, como tener hijos pequeños con los que se complica la salida, o simplemente porque el clima no nos invita a hacerlo.

Por todo esto y mucho más, cada vez que salimos e invertimos en una buena cena, queremos que la mayor parte del momento cumpla con nuestras expectativas.

Hay varias cositas, que no salen como esperábamos y nos hacen enojar. (Que obviamente si fuéramos adolescentes, jóvenes y con onda no nos importarían en lo más mínimo). Y lo que podría ser una salida placentera termina siendo una pesadilla (O tampoco para tanto…).

Entrar con chicos pequeños a un lugar y que la encargada te diga que no pueden atenderte porque se les está acabando la comida, viendo que entran dos adultos detrás de tuyo y los atienden muy amablemente, es chocante. A todos nos ha molestado alguna vez el llanto desconsolado de un niño, o la madre gritándole para que se porte bien, pero si la casa se reserva el derecho de admisión, con poner un cartelito que indique que no se puede ingresar con menores, haría menos incómodas las cosas.

El que todos los comensales (sean 2, 5 o más) coman al mismo tiempo, no siempre sucede. El que se pide una ENSALADA solamente, y la quiere como plato central (no como entrada), no quiere comer antes que los demás y mirar más tarde como “chico hambriento” el frondoso plato principal de los demás.

Para los que piden carne roja, el punto de cocción es un desafío de “Elige tu propia aventura”. “A PUNTO”, “COCIDO”, “SECO”. Algo tan subjetivo para el mozo, como para el chef, como para el cliente. (Y obvio que si llegó el plato con un punto diferente al solicitado o esperado, nadie se anima a devolverlo por el mito siempre existente de que vuelva con un “ingrediente extra” de mal gusto).

Bebidas con gas, sin gas, frías o al tiempo (o al natural, o sin meter a la heladera). Si pedimos esto último, no pretendemos que nos traigan agua pura de manantial, sino directamente del pack como bajo del camión repartidor sin meterla a la heladera (Pasale un trapo y traela nomas…).

La higiene de los baños habla de la higiene del lugar, y hay algunos que en los que para evitar tocar el sanitario, nos obligamos a hacer sentadillas.

Y al momento de pedir la cuenta, cabecear e intentar captar la mirada del mozo para hacerle “LA SEÑA” y que nos diga cuanto le debemos.

Hay muchos clientes realmente insoportables (no es mi caso, yo soy re piola jajaja), pero también entiendan los gastronómicos, el especial momento del que uno quiere disfrutar que con un poquito de valor agregado, se logra dejar satisfecho tanto al cliente y como al dueño.

(Y nobleza obliga: Felicitar a muchos restaurantes que tienen toda la onda y ofrecen un servicio excelente.)

miércoles, 25 de enero de 2017

La Vecindad del Chavo... Un Poroto!

La convivencia no es fácil. Y mucho menos en un edificio teniendo en cuenta que cada persona se maneja de manera diferente, por lo que siempre pueden aparecer "roces" entre vecinos.

Hay mucha diferencia si sos dueño o inquilino. El dueño es rey y te hace saber que si no te portas bien lo va a plantear en la reunión de consorcio, a la que uno vos no tenés ni el más mínimo acceso.

Tampoco es lo mismo ser estudiante universitario y que tu vecino escuche música a todo volumen a cualquier hora; que se madre o padre y no poder hacer dormir a tu bebé por "ESA” melodía (Que ya no es música y se convierte en ruido molesto).

Ajustarse a un reglamento de convivencia sería lo óptimo pero siempre están los que sacan la basura fuera de horario y convierten el palier en un aromatizador de olores putrefactos.

Y si bien cada edificio tiene su particularidad, hay vecinos que existen y son comunes en casi todos.

A saber: El del tercero que está remodelando su hogar y hace que te olvides de descansar hasta tarde o tener una siesta placentera porque sentís que estas durmiendo con un taladro prendido (Más allá del polvillo que entra en tu morada sin previa invitación, no existen sábado ni domingos).

La pareja del octavo que la pasa increíble teniendo sexo a cualquier hora del día mientras una trata de tapar su expresión de placer con el volumen del tele (De pura envidia obviamente).

La del quinto que le grita como desquiciada a la hija porque no le da ni cinco de pelota (y no le va a dar bolilla porque no le interesa para nada tener su cuarto ordenado).

Y la de la planta baja que se la pasa chusmeando quien sale, quien entra y con quien!?

El que se quedo en el tiempo y escucha "la última cuenta regresiva" siete veces por día… y hace que nos den ganas de grabarle un CD (o un casette) con los mejores temas de los 80, como para variar un poco.

A todo esto seguro segurísimo hay un habitante que tiene una mascota malcriada que hace sus necesidades en cualquier lado y que llora cada vez que él se va a trabajar... que lejos de provocarnos tristeza, queremos matar al dueño y apropiarnos de la mascota para enseñarle buenos modales.

Si convivir con los seres que amamos a veces se torna difícil, imaginen convivir con gente que ni siquiera le conocemos la cara. A veces puede resultar divertido y otras (la mayoría) una tortura. Todo depende de la edad y la etapa de nuestras vidas que estemos transitando, pero juro que después de los 30 y pico no tenemos absolutamente nada de paciencia y tolerancia.

martes, 24 de enero de 2017

Vamos de paseo en un auto muy muy nuevo

Estamos en una era donde tenemos mucha tecnología a nuestro alcance (que a veces usamos como una herramienta para el bien y otras para hacer macanas).

Autos que se estacionan solos, con dirección automática, que se abren sin necesidad de tener una llave, que cambian a 4x4 cuando el terreno lo requiere, y mucho más!

Hace unos días se me quedo sin batería la camioneta. Algo tan simple como eso, que obviamente me puso en una situación muy nerviosa (digan que una pareja de amigos me ayudó prestándome su vehículo para llegar a destino).

Podría haber hecho puente? (o algo asi…) Si obvio!! Siempre y cuando hubiese sabido donde tenía las pinzas cocodrilo o donde se encontraba la batería. Y antes que nada tendría que haber abierto el capot que no sé ni cómo se hace. (Urgente un curso básico -aunque más no sea- de supervivencia a conducir un auto.)

Lo más sorprendente cuando conté mi super aventura (donde había luces que titilaban y mensajes que no sé que me querían decir), fue el comentario de una persona de unos 60 y pico de años que me dijo: “Tu generación está muy mal acostumbrada!!! Al menos ahora tenias un celular para poderte comunicar con un remolque o quien fuere. (Cosa que tampoco se me ocurrió) Hace 30 años, no existían los celulares, muchos autos no tenían la suficiente tecnología como para avisar si el motor estaba caliente, o no andaba el medidor de combustible y no sabias hasta dónde iba a alcanzar la nafta”.

Me sentí ingrata de alguna manera….

De repente la mesa se lleno de anécdotas graciosas de viajes de nuestra niñez llenos de percances, y anécdotas que seguimos recordando.

Noches en pueblos desconocidos porque la velocidad promedio del viaje era de 80 kmxh y había que hacer en 2 o 3 días el trayecto.

Caminatas de de 1 o 2 km con el bidón hasta la estación de servicio más cercana porque se calculó mal el rendimiento del tanque (por poquitito no se llego).

Autos humeando por recalentamiento del motor en medio de avenidas muy transitadas.

Repasadores en las ventanillas que hacían de parasoles porque no había vidrios polarizados.

Horas jugando al juego de las patentes porque ni hablar de DVD portátil.

Deberíamos aprovechar y usar de manera correcta la tecnología y ser más responsables a la hora de subirnos a un auto. No es sólo poner en contacto el vehículo y acelerar como locas, sino leer el manual y tomar conciencia de la responsabilidad que implica conducir.

Recórcholis! me equivoque de chat

A quien no le paso escribir a una persona (o a varias) información o cuestiones que no eran inherentes a ellos? Y si sos despistada más aún!!!

Desde mi punto de vista el Whatsapp Web es lo peor en este sentido: si no estás prestando atención o estás como desquiciada escribiendo el chusmerío del día, lo mejor es respirar hondo y usar el chat común del celular, porque podes meter la pata fuleramente. Y de ahí a querer desaparecer del mapa hay un solo paso.

Como tratas de explicar que no era para esa/s persona/s? No siempre se zafa con un “JAJAJAJA ERA BROMA!”. Y comenzás a desarrollar un plan lleno de mentiras, enredos y confusiones para arreglar lo que dijiste terminando en una sucesión de hechos bochornosos.

Siempre y cuando la información que revelaste no sea comprometedora, lo mejor es admitir que te equivocaste de chat y salir lo mas airoso posible. Ahora, si la información es comprometedora… te va a costar sangre, sudor y lágrimas.

Supongo que cuando uno tiene una vida virtual muy activa y muchos chats abiertos al mismo tiempo para chatear con diferentes personas, es muy común equivocarse de ventana confundiendo las conversaciones, por lo que es vital poner atención para evitar herir susceptibilidades o sentimientos.

Ejemplos sobran!

Si andas de trampa y mandaste el mensaje a tu esposo en vez de a tu amante...

Si mandaste el chat donde hablas mal de una amiga, a la amiga a la cual estás defenestrando…

Si mandaste al chat de las madres del jardín un mensaje donde contás una noche apasionada de amor a una amiga…

Si tu papa te envió una foto porno a vos, pensando que era un amigo suyo…

O lo peor! Que el interlocutor equivocado te siga la corriente y vos no te des cuenta. Cabe la opción de que quede en una anécdota graciosa, o en un papelón total. Todo depende a quien le toco recibir el mensaje.

Todos somos un poco chismosos, pero podríamos ser mejores personas y no hablar mal de los demás, no andar de trampa; o cruzar los dedos para que te crean lo que investaste para zafar y ese pequeño incidente quede en el olvido.

miércoles, 11 de enero de 2017

El viajar es un placer

A quien no le gustaría vivir viajando? Para muchos la motivación de levantarse temprano para ir a trabajar, es poder invertir en viajes durante las vacaciones.

Dicen que viajar es cambiarle la ropa al alma. En otras palabras, viajar nos cambia la ropa para estar siempre frescos, y con ganas de transmitir vitalidad y buena onda a los demás. Porque cuando uno viaja es inmensamente feliz!

Y el descanso o disfrute no comienza cuando llegamos a destino, sino desde que decidimos el destino, hasta que volvemos a casa.

No es necesario contar con mucho dinero, se puede andar con poco y disfrutar de igual manera.

Es importante decidir el destino y ver como se acomoda a nuestro presupuesto (Gasolero o Deluxe).

Lo ideal es programar la aventura con anticipación, ya que de esta manera se pueden aprovechar más las promociones en transporte. (Tengo una amiga que es capa armando viajes! Mejor que un agente! No sé como lo hace, pero mi próximo viaje me lo arma ella)

Elegir hospedaje: hotel, aparts, o hostels. Y el régimen: con desayuno, media pensión o all inclusive. Todo va a depender si es un viaje para descansar en la playa o recorrer y conocer mucho. A gusto y piacere de cada uno! Siempre hay que tratar de no desperdiciar comidas pagas en el hotel, que no vamos a poder disfrutar porque nos agarra el mediodía en la otra punta de la ciudad.

Las actividades que vamos a realizar van a depender del clima del lugar como así también la ropa que vamos a llevar. Que tema!!! Armar la valija!!! (Enrollar la ropa, poner el calzado en bolsas y comenzar a jugar al TRETIS para aprovechar al máximo el espacio)

Lo mejor es hacer un Check List con todo lo indispensable (medicamentos, calzado cómodo, un abrigo -seguro si no lo llevas hace frio, así que aunque sea de gusto, hay que llevarlo-) y en lo que respecta a salud, corroborar si es necesario colocarse alguna vacuna antes de viajar o algún tipo de autorización para llevar algún medicamente desde el lugar de origen.

Se desarrollan tantas apps para viajeros, que se hace cada vez más fácil viajar en las mejores condiciones. Desde opiniones sobre lugares hasta tips para elegir los outfits.

Tanto para viajar dentro como fuera del país es necesario que tengamos toda la documentación en regla y si viajas con niños pequeños, no olvidar llevar una dosis grande de paciencia y mucho amor.

Felices Vacaciones!